mercoledì, dicembre 19, 2007

Entrevista a Carlos Alberto Montaner - Cuba en el Mundo -

Cuba en el Mundo - Entrevistas

"..El vicepresidente de la Federación Internacional Liberal de Cuba,
Carlos Alberto Montaner, concedió una entrevista al diario peruano
Correo luego de su magistral exposición en la V Convención de
Economía: "Perspectivas Económicas y Políticas de América Latina",
organizada en Lima por la Facultad de Economía y la Escuela de
Postgrado de la UPC . El periodista y escritor afirmó que Raúl Castro
llevará a una apertura económica y social a Cuba luego de la muerte de
su hermano Fidel..."

Por Ivan Munayco

Correo/Noticuba Internacional

Lima, 16 de septiembre del 2007

Correo: Raúl Castro ha mostrado tímidos acercamientos de apertura con
EEUU. ¿Significa que la cúpula del régimen socialista cubano sabe que
Fidel no volverá a gobernar?
Carlos Alberto Montaner: Fidel no va a regresar. Hace cien días que no
aparece porque su deterioro físico es muy grande. Aparentemente
conserva la capacidad y posibilidad de escribir esas reflexiones que
publica, pero son frases incoherentes e inconexas; viejas ideas
recurrentes de la historia, pero sin haber perdido totalmente la
razón. La gerencia del país está en manos de Raúl, pero la dirección
ideológica aún está en poder de Fidel.

C: ¿Considera que la inevitable muerte del líder cubano por su
deteriorada salud y avanzada edad ha creado esperanzas entre los
cubanos de un pronto cambio en la isla luego de cincuenta años de
castrismo?
CAM:Los adversarios del régimen, los demócratas y los reformistas
saben que Cuba está en una grave crisis económica desde hace muchos
años. El pueblo ya no cree en ninguna de las fórmulas socialistas, por
lo cual el camino será claro y se buscará un cambio real.

C: ¿Cómo se puede lograr ese cambio?
CAM: Se logrará modificando la legislación y abriendo los cauces de
participación de la sociedad, que inmediatamente generará partidos
políticos. Después vendrá una fragmentación del poder que finalmente
conducirá a la democracia. Esto conducirá a la aparición de la
propiedad privada y la economía de mercado. A los cubanos les conviene
que haya una gran presión de las grandes democracias para tratar de
forzar el cambio político hacia la libertad.

C: ¿Existe la posibilidad de que Chávez invada política y militarmente
la isla si muere Fidel para mantener el control de su principal aliado
y de su régimen?
CAM: La decisión será de la cúpula cubana, y ese tema es muy
importante. Cabe un factor de discordia. En diciembre del 2005, el
vicepresidente de Cuba, Carlos Lage -que es la tercera figura más
importante de la cúpula y el administrador del manicomio-, dijo en
Caracas que Cuba tenía dos presidentes: Fidel Castro y Hugo Chávez.
Esto generó un gran problema interno en la cúpula y no se volvió a
repetir algo similar. Sabemos bien que para la cúpula dirigente, y en
general para quienes llevan 50 años en el poder, es ridículo pensar
que de pronto el líder político y militar del país va a ser Chávez,
por quien sienten un profundo desprecio. Los militares cubanos que
pelearon en Angola, Etiopía, y han conspirado en todo el mundo con
muchos éxitos, sienten un profundo desprecio por el mandatario
venezolano, al considerarlo un militar sin ninguna victoria y un
monigote vestido con uniforme. A los administradores y gerentes les
parece un ignorante y cuando comparan ambas figuras, encuentran en
Castro una dignidad expresiva que no tiene Chávez. Es un hombre que
está mucho más cerca a un payaso de circo que a un líder del gran
teatro político mundial.

C: Sin embargo, están los petrodólares...
CAM: Eso es un estímulo para la apertura económica. Porque vivir de la
caridad y compasión venezolana coloca al gobierno de Cuba en
desventaja. Si ellos fueran capaces de multiplicar sus fuentes
económicas, y pudieran efectivamente generar más riqueza en el país -
que actualmente está en condiciones miserables-, la dependencia de
Chávez sería menor. La gran paradoja es que el mandatario venezolano
es un elemento de discordia en el terreno político y un incentivo para
alejarse del modelo socialista porque si algo saben los cubanos,
incluso la cúpula dirigente, es que el colectivismo conduce a la
miseria. La cúpula utilizará a Chávez cuanto pueda mientras se prepara
para dejarlo fuera del camino.

C: ¿Cómo sería la relación de Raúl con Chávez?
CAM: El hermano de Fidel tiene mala opinión de Hugo Chávez, las
relaciones no son buenas. Este hombre lleva 50 años esperando su
oportunidad y no le vendría bien que de pronto le digan que el próximo
presidente de Cuba es Chávez, porque escapa por completo a sus
intereses. Además, los rasgos sicológicos de Raúl son totalmente
contrarios a Fidel. Mientras Chávez y Fidel tienen muchas cosas en
común, como el mesianismo y su protagonismo en la historia, Raúl es un
hombre sicológicamente pequeñito. Inclusive uno ve que, cuando se
abrazan, Raúl está a punto de vomitar.

C: Entonces también quiere pasar a la historia y la única manera sería
cambiando radicalmente a Cuba cuando muera Fidel...
CAM: Si Fidel muere a corto plazo, Raúl intentará modificaciones
económicas importantes. Primero intentará una reforma parecida a la de
China, con ciertos espacios para la propiedad privada. Yo creo que
tratará de hacer un cambio para acomodarse a la realidad porque Fidel
es un hombre indiferente a la realidad. Si uno lee los documentos de
la propia cúpula, uno se da cuenta que busca mejores estándares de
vida para los cubanos, que actualmente son infrahumanos. Pero para eso
es necesario cambiar el modelo de producción del país, no se puede
insistir en el colectivismo. Fidel sigue recetando la austeridad y
pobreza para los demás.

C: ¿Cómo ve el futuro de Latinoamérica con la amenaza socialista desde
Venezuela?
CAM: Donde tiene más capacidad de intriga es en la región andina,
indudablemente. El Perú está en la mira de Hugo Chávez. Como no logró
el triunfo de Ollanta Humala en las últimas elecciones, creo que lo
intentará en las próximas con él o alguien parecido. Inyectará la
cantidad de dinero que haga falta para catapultar y llevar a la
Presidencia a alguien de esa misma cuerda. El barril de petróleo está
por 80 dólares, así que le sobra recursos. Eso sería desastroso y
sumamente terrible para Perú. Esperemos que la clase política peruana
no se suicide, como lo hizo la boliviana, venezolana, ecuatoriana y
nicaragüense.