: "Dos años antes de morir en 1832, Goethe, que no era bajo ningún concepto un escritor conformista ni apátrida pero veía en el nuevo Código Civil francés la encarnación del progreso frente al conservadurismo prusiano, condenó cualquier pacto fáustico con el poder en el campo literario. “Jamás - escribe el autor del Fausto - me he preguntado qué desearía el pueblo ni cómo yo (por medio de mi poesía) podría servir al todo…” El escritor que lo haga - afirma categóricamente - “está perdido como autor; debe decir adiós a su libertad de espíritu, a su imparcialidad, y encasquetarse hasta las orejas el capirote de la mojigatería y el odio”"