Noticias24.- Lo visto hoy se asemeja a aquella Europa de los años 30, en la que los políticos ingleses querían apaciguar a Hitler con gestos y carantoñas. ¿Hará lo mismo la Comunidad Internacional ante las pruebas de colaboración con las FARC que presentó Colombia y ratificó Interpol? Lealo en la opinión de
Antonio Sánchez García.
Del estudio de ese cúmulo de documentos, pruebas eventuales en un juicio por traición a la patria y otros de lesa humanidad, cometidos por el presidente de la república y alguno de sus colaboradores, entre ellos un ministro de interior y justicia y varios generales de su Fuerza Armada Nacional, se derivan crímenes de gran envergadura, sometidos hoy a la penalización de la justicia internacional que, desde el juicio al general Augusto Pinochet, a Milosevich y Sadam Hussein, entre otros, se ha venido imponiendo en la jurisprudencia internacional. Sus delitos pueden ser sujeto de inculpación de parte de cualquier ciudadano de cualquier país del mundo. Y no prescriben.