De médicos cubanos y otros chismes
¿La medicina cubana llegó para salvar la venezolana?
En un pueblito en la costa que se llama Todasana ubicado en el estado Vargas, hay un ambulatorio rural tipo I con los insumos necesarios y con un buen personal de enfermería. De ahí me llega esta historia que por su contenido narró a continuación.
“Hasta aquí todo va muy bien, el pequeño detalle es que también ‘trabaja’ un médico cubano, quien está en Venezuela desde enero del presente año, dice ser galeno familiar y tiene 9 años de graduado. Al ambulatorio hubo que cambiarle la cerradura principal y todas las llaves de cada dependencia debido a que estaban sucediendo irregularidades con los equipos y medicamentos.
Volviendo al médico cubano que ahí presta servicios, me cuentan que éste señor es un altanero; para él solo hay dos medicinas, la cubana y la venezolana; él cree firmemente que él está aquí para salvar a los venezolanos de la medicina venezolana (valga la redundancia). No emplea términos médicos en sus diagnósticos.
Si uno revisa el registro de la morbilidad del ambulatorio en cuestión, es increíble ver lo que él hace; sus diagnósticos son: ‘dolor fuerte de barriga’, ‘neumopatía inflamatoria’ (sin ni siquiera tener un microscopio); usa abreviaciones sin estar muy claro qué está abreviando; por ejemplo, abrevia IRA y le es indiferente que sea ‘Infección Respiratoria Alta’ o aguda. Total, para qué si siempre usa el mismo tratamiento.
Y hablando de tratamiento, ojalá solo los errores fueran de diagnósticos pero por ejemplo de las dosis pediátricas no tiene ni idea, cree que es algo que se usa solo en la medicina venezolana, para él (el médico cubano) todo es media cucharada o una cucharadita (según el tamaño del niño), los antiasmáticos son antigripales, no se conocen los espectros de los antibióticos”.
Comenta quien me envía esta carta que “ya ví un niñito con los dientes negros por el abuso de las tetraciclinas. Las virosis las trata con penicilina. Lo último que ví fue cómo hidrataba a un paciente que no estaba deshidratado con 3500 cc a goteo rápido, cuando le preguntaron de dónde había sacado ese cálculo no supo responder. Claro está, todo indica que éste galeno desconoce que esos cálculos se sacan en base a la regla de Holliday y para eso hay que ir a la escuela de medicina.
No hace citologías porque según él, en Cuba se encargan las enfermeras; da la impresión que no aprendió nunca a hacerlas. Pero lo peor no son los errores (aunque es preocupante la cantidad de errores que comete y lo seguido), sino que al intentar hablar con él y planteársele las cosas que está haciendo y las que está dejando de hacer, replica en un tono muy convincente como si el de la duda fuera uno: ‘Todo lo que yo no estoy de acuerdo lo reviso en literatura, tanto en español como en inglés’. Ahora se vuelve a plantear la misma pregunta: ¿Será necesario que sigan mandando a Venezuela médicos cubanos para ’salvar’ la medicina venezolana y para que ocupen los pocos cargos de rural?
Esta parte como que no la sabe el embajador de Cuba, mucho menos el ministro de Sanidad y que hablar de cómo engañan al comandante Hugo Chávez.
Todos los recién graduados necesitan trabajar y este trabajo se lo están dando a médicos cubanos que ni siquiera tienen licencia para ejercer en Venezuela, que tampoco tienen los conocimientos.
Médicos recién graduados están trabajando con colegas cubanos y da mucha tristeza cuando vemos que a los extranjeros se les ofrecen todas las comodidades (casa, transporte y comida entre otros) y a los venezolanos recién graduados solo les ofrecen los puestos, y tienen que costearse parte de la comida y el pasaje de jeep, carrito y metro para poder llegar a un lugar donde necesitan a un médico venezolano, simplemente a un médico. Esta es la pura verdad”.
Olla de presión
La que está a punto de reventar en el Municipio Baruta, con la venta de terrenos a raíz de la ordenanza de zonificación del sector La Palomera y el programa de regulación de la ocupación y tenencia de la tierra, mejor conocido como programa “ROTT” que se quiere poner en marcha en la zona industrial de “La Naya” del mismo Municipio. Por cierto los papeleos de zonificación cuestan ¡hasta 160 millones de bolívares!
Dato
Hay “corre corre” y “exceso de trabajo” en el consulado de Colombia en Caracas… ¿La razón? El temor que tienen los naturalizados después del año 2004 de perder la doble nacionalidad. La noticia que se corrió como pólvora ha desatado visitas nerviosas al consulado y lo triste de la situación radica, en que los hermanos colombianos ante la disyuntiva de perder una de las dos nacionalidades, están optando por quedarse con la colombiana, por temor a lo que pueda pasar en Venezuela…
Alerta roja
Hay 27 vehículos fuera de servicio en la Estación de Bomberos de Guarenas. No hay equipos de protección personal para los apaga fuego que a diario exponen sus vidas por salvar la de los demás. En cuatros meses, seis bomberos se quemaron mientras prestaban servicio durante un incendio en Capaya. La flotilla está en precarias condiciones y solo prestan servicio a medias un camión cisterna de 6 mil litros y camión IPV para inundaciones y que no es apto para dar respuesta inmediata. La denuncia y el trabajo de inventario de las carencias de los hombres de azul la hacen miembros de los consejos comunales y de la contraloría social. No es justo.
A Calzón quitao dominical
Wilmer Suárez
La Voz